martes, 7 de agosto de 2018

EL VIAJE YA HA COMENZADO

Tengo días buenos y días más tristes. La  verdad es que me quedé con lo mejor de la  pareja. Rubén, Helena y Manuel. Los  domingos por la  tarde, el personal parece que no tenga ninguna prisa  por irse. Nos sentamos en la  terraza y Francisco Javier  Martínez García de la Rosa,  a quien sus padres no le  dejaron  más que una casa, pero sí muchos apellidos, me hace reir. Es  como Obélix, incluidas las rastas y se pasa con las croquetas pues las hace de 300 gr. cuando deberían ser de 150. Pero ahí estamos. Esto es lo que hay.
Nos vinimos a vivir aquí con una niña que no había cumplido todavía los siete años. Se nos acabó el dinero y dormíamos los tres juntos en una habitación junto a la  barra. Un sofá  cama, un perchero y un televisor portátil nos acompañó durante dos años. Por la  noche, se escuchaba el trasiego de las ratas por el techo. Había tanto que hacer. Y qué aprender. Yo seguí  con mi trabajo en la Generalitat durante unos tres años.
No teníamos ni teléfono. Un TRAC que costó 125.000 pesetas y que pagamos a plazos. Y  la gente venía y seguía vinienddo.
Fue  una de sus ideas locas. Montar un restaurante en mitad de la Marjal. Pero  también se le podría haber ocurrido montar una fábrica de clavos. Cuando en la  vida no  te han dado elección de oficio ni beneficio, todo es posible.
Me arrastró, siempre me arrastró. Y una vez llegado el desastre, no había más que apechugar con ello.
Recuerdo que a los tres meses de conocernos, me contó que teníamos que ir una tarde a un bufete de abogados en la plaza del Ayuntamiento. Le reclamaban 300.000 pesetas de entonces, en quesos. Unos quesos de una parada que tenía en el mercado de Ruzafa y que yo no había visto en la vida. Le avalé las letras y le pagué los quesos con mi sueldo de funcionaria del Ayuntamiento de Sedaví. Cuando le reclamé el dinero, me propuso matrimonio. Yo tenía doce años menos que él. Toda la vida por delante y ningún crédito.
Pero es un hombre tan guapo y tan educado...
Al cabo  de casi diez años de matrimonio, se le ocurrrió, puesto que mi padre iba a vender la granja, montr allí un restaurante.
Un restaurante? Qué sabíamos nosotros de cocina? Saben ustedes lo que es la vida de la hostelería?
A los dos meses de haberlo abierto, ya estaba dispuesto a tirar la toalla. Pero  yo  estaba allí, que soy una curranta de mucho cuidado. Entusiamo. ¿Qué significa? Una palabra que nos dejaron los griegos.
El entusiasmo es una llamada de los dioses.








7 comentarios:

  1. Això no ha canviat,amiga: continues tenint el mateix entusiasme front la vida.

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  2. Eres una gran MUJER No cambies nunca

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  3. Te giero Maria Dolores .Para mi tu soi una mujer mui grsnde mui fuerte .Grasias para todo Este 14 anos gue estaba con vosotros son mui importante

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  4. Tu no te das cuenta pero durante estos años habéis cambiado mucho los dos. El es un hombre interesante y educado pero es asi xq tu te enamoraste de una persona así. Y gracias a eso tienes lo mejor de tu vida Helena y Manuel junto a Rubén.
    Tu eres fuerte y superaras esto xq nadie es de nadie. El que no te valora como eres hace que busques incansablemente la perfeccion para nada. Libertad al que se siente esclavo, pero von todas las consecuencias.
    Dale gracias al que tocandole el gordo de la loteria se conforma con la pedrea.te ha devuelto el decimo.

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  5. Vuic continuar llegint la teva historia. Es impresionant el afan de superacio que tens i tú eu podràs en tot. Cap al davant i si algun dia escrius un llibre autobiografic....disme-u perque es la meua pasió llegir-los i seré una de les primeres compraores. Me diu Angel que et diga que soc Vicen la que t'ha escrit.

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    1. Gràcies, Vicen.
      Em fà il.lusió que la gent em llisca i em fassa comentaris, però els teus em fan especial il.lusió.

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